[Reto] No puede ser... {Pansy Parkinson}

El día iba relativamente bien hasta que, a la hora del desayuno, llegó la correspondencia y una lechuza le entregó una carta bastante peculiar. Extrañado, Draco abrió la carta y comenzó a leerla con atención, ignorando a las personas que se encontraban cerca suyo. Se puso de pie y guardó el sobre en su bolsillo derecho, frunciendo levemente el ceño para luego abrir los ojos de par en par. No podía creer lo que decía ahí. ¿Su padre lo había comprometido con una Muggle? ¿Una MUGGLE? ¡No, imposible! Aquello debía ser un error. Volvió a leer la carta, observó de soslayo a su alrededor y al comprobar que nadie tenía su atención puesta en él, salió a toda prisa del Gran Comedor, en dirección a las mazmorras.

En el camino, leyó y releyó rápidamente la carta una y otra vez. Definitivamente aquello debía ser un error. Lo primero que se le vino a la cabeza fue enviarle una carta de respuesta a su padre, aunque le resultaba imposible el siquiera pensar en reprocharle algo. Pero, ¡es que aquello era realmente imposible! Iba a verificarlo, leyendo tranquila y detenidamente la carta en su dormitorio. Tal vez había leído mal, después de todo, sus nervios por el trabajo que le habían encomendado, le afectaba bastante al rubio, en distintos ámbitos. Intentando relajarse, bajó por las escaleras, llegando a las mazmorras. Atravesó la pared, sin antes murmurar la contraseña, claro, entró y se detuvo, respirando más tranquilo. Observó a su alrededor para poder verificar que en ese instante no había otra serpiente en el lugar y, luego, se acercó hasta uno de los sillones, el más cómodo.

Prácticamente se tiró de espaldas al sofá. Luego se acomodó, sacando la carta de su bolsillo y apoyando los codos en sus rodillas, se concentró en leer detenidamente el papel que parecía ser una broma de mal gusto. -Imposible...- murmuró, soltando de golpe todo el aire que tenía en los pulmones. Sacó el sobre de la carta y lo dejó a su costado, frunciendo los labios. ¿Acaso aquello era una especie de "prueba"? O alguien quería hacerle pasar un mal rato, porque definitivamente no podía creer que realmente su padre le había enviado aquella carta.

-Realmente estúpido.- bufó.

De pronto, escuchó cómo la entrada a la Sala Común se abría y el ruido de unos pasos le seguía.